Actualidad | 12 sep 2024
Alberto Fujimori: Un legado que divide a Perú tras su fallecimiento
El exmandatario peruano falleció a los 86 años, cerrando una etapa marcada por logros económicos y crímenes de derechos humanos. Su muerte deja un país dividido entre fujimoristas y detractores.
Este miércoles, 11 de septiembre, a los 86 años, falleció Alberto Fujimori, uno de los personajes más influyentes y controvertidos en la historia reciente de Perú. El anuncio fue hecho por su hija, Keiko Fujimori, lideresa de Fuerza Popular, y marca el cierre de una era para el país.
Fujimori, ingeniero agrónomo de origen japonés, llegó inesperadamente a la presidencia en 1990 tras vencer al escritor Mario Vargas Llosa. Su gobierno se caracterizó por una férrea política de ajuste económico, conocida como el “fujishock”, y su lucha contra la insurgencia de Sendero Luminoso, logros que lo posicionaron como un líder admirado por muchos.
Sin embargo, su mandato también estuvo teñido por el autoritarismo y graves violaciones a los derechos humanos, como las matanzas de Barrios Altos y La Cantuta, por las que fue condenado en 2009. El autogolpe de 1992, que disolvió el Congreso y suspendió la constitución, consolidó su poder, pero también dejó una huella de corrupción y represión que hasta hoy divide a los peruanos.
Un legado que sigue vivo
Fujimori no dejó de influir en la política peruana, incluso durante los años que pasó en prisión. Su facción política, el fujimorismo, sigue siendo una fuerza poderosa, encabezada por Keiko Fujimori. Sin embargo, las heridas de las víctimas de su régimen siguen abiertas, lo que dificulta la reconciliación entre los sectores fujimoristas y antifujimoristas.
Una presidencia marcada por luces y sombras
El gobierno de Fujimori será recordado tanto por la mejora económica que estabilizó al país, como por las denuncias de corrupción y las violaciones a los derechos humanos. La captura del líder de Sendero Luminoso, Abimael Guzmán, fue uno de sus mayores triunfos, pero su mandato también estuvo lleno de controversias, como el escándalo de los "vladivideos", que destapó una red de corrupción encabezada por su asesor Vladimiro Montesinos.
A pesar de estos escándalos, muchos peruanos aún lo recuerdan como el hombre que trajo orden y prosperidad en tiempos de crisis. Otros, en cambio, lo ven como un dictador que aprovechó su posición para corromper las instituciones y perpetuar el abuso de poder.