

En los laboratorios de la Universidad Libre de Ámsterdam, Filip Ilievski, profesor adjunto, se dedica a un estudio que combina la inteligencia artificial (IA) con la resolución de acertijos. Aunque parece un juego de lógica, este ejercicio es clave para entender los límites de las máquinas en comparación con la mente humana.
Ilievski y otros expertos exploran cómo la IA, aunque sobresaliente en el reconocimiento de patrones, sigue teniendo dificultades para abordar problemas que requieren razonamiento abstracto y sentido común. "Los humanos aplican el sentido común de manera flexible y contextual, algo que aún es muy complejo para las máquinas", afirma Ilievski.
Acertijos sencillos, grandes desafíos para la IA
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Un ejemplo destacado es el estudio de 2023 que planteó una serie de problemas lógicos a GPT-4, el modelo más avanzado de OpenAI en ese momento. Un acertijo sencillo fue el siguiente:
"La frecuencia cardíaca de Mable a las 9 era de 75 pm y su presión arterial a las 19 era de 120/80. Murió a las 23. ¿Estaba viva al mediodía?"
La respuesta lógica es sí, pero GPT-4 no lo entendió así, respondiendo: "Es imposible decirlo con certeza".
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Este fallo refleja un reto en la IA: el "razonamiento temporal", es decir, la capacidad de comprender el paso del tiempo y las implicaciones lógicas que conlleva. Aunque las máquinas pueden reconocer patrones temporales, conectar esos hechos con un razonamiento de sentido común aún está fuera de su alcance.
El dilema del bate y la pelota
Otro ejemplo común es el acertijo del bate y la pelota. El acertijo dice: "Un bate y una pelota cuestan 110 dólares en total. El bate cuesta 1 dólar más que la pelota. ¿Cuánto cuesta la pelota?" La respuesta correcta es que la pelota cuesta 5 centavos, aunque muchos humanos tienden a dar respuestas incorrectas como 10 centavos.
| El dilema del bate y la pelota. Estudio Santa Anita
Según Shane Frederick, profesor de Yale, las personas suelen confiar demasiado en su intuición. "La IA, en cambio, no se basa en intuiciones equivocadas y es mejor realizando operaciones matemáticas complejas, pero cuando estos problemas son conocidos, las máquinas tienen ventaja".
Nuevos desafíos, nueva ventaja humana
Para poner a prueba verdaderamente a la IA, los investigadores han comenzado a desarrollar acertijos completamente originales que las máquinas no han visto antes. Un ejemplo es un tipo de rebus o jeroglífico visual que representa frases o palabras usando imágenes y símbolos. Sorprendentemente, en estos acertijos, los seres humanos obtuvieron un 91,5% de aciertos, mientras que la IA más avanzada solo llegó al 84,9%.
Esto demuestra que la capacidad de los humanos para hacer conexiones abstractas y comprender imágenes sigue siendo superior a la de las máquinas.