"El baño del diablo", una inquietante exploración de la depresión femenina en la Europa rural del siglo XVIII, ha conquistado el Festival de Sitges, el evento de cine fantástico y de terror más relevante del mundo. Este sábado, la película dirigida por Veronika Franz y Severin Fiala recibió el máximo galardón del festival, además de ser seleccionada para representar a Austria en la próxima carrera por los Óscar.

La trama de "El baño del diablo" sigue la vida de Agnes (interpretada por Anja Plaschg), una mujer recién casada que se enfrenta a una profunda depresión tras descubrir las exigencias de su nueva vida en una sociedad patriarcal y oscura.

El Festival de Sitges, que celebra su 57ª edición, también otorgó el premio Blood Window a la mejor película latinoamericana a "Mi bestia", de Camila Beltrán. Ambientada en Bogotá en 1996, la película narra la historia de Mila, una adolescente de 13 años que, ante el miedo irracional por un inminente eclipse, comienza a cuestionar el mal y las transformaciones que sufre su propio cuerpo.

El festival, conocido por atraer a miles de aficionados al terror y lo fantástico, contó este año con la presencia de destacados invitados, como el actor estadounidense Giancarlo Esposito, célebre por su papel de Gus Fring en "Breaking Bad", y el aclamado director Mike Flanagan, considerado uno de los maestros del terror contemporáneo, conocido por su serie "La maldición de Hill House".