Al menos 90 personas, entre ellas 25 niños, murieron este martes tras un ataque israelí en el norte de Gaza, según informó el Ministerio de Salud de la región. La ofensiva aérea afectó un edificio de cinco pisos en el que palestinos desplazados se refugiaban. Decenas permanecen desaparecidos, mientras se teme que el número de víctimas aumente a medida que avanzan las labores de rescate.

En paralelo, desde Cisjordania, la exalcaldesa de Barcelona, Ada Colau, y el eurodiputado Jaume Asens, que acompañaban a una delegación internacional durante la cosecha de aceitunas en apoyo a agricultores palestinos, denunciaron un ataque del ejército israelí. “Sin intentar hablar, empezaron a disparar gases lacrimógenos y bombas de sonido", relató Colau en un video en redes sociales, señalando también la retención de un granjero y un periodista palestinos.

La exalcaldesa llamó a la comunidad internacional a "detener el genocidio en Gaza" y pidió que representantes públicos visiten la región para visibilizar el proceso de colonización en territorio palestino.

Situación crítica en la Franja de Gaza
Funcionarios del Ministerio de Salud de Gaza reportan que el número de muertos por la ofensiva israelí ha superado los 43,000, un número que incluye tanto a civiles como a combatientes y que evidencia la devastadora magnitud del conflicto.

Además, el lunes el parlamento israelí aprobó dos leyes que limitan el trabajo de la agencia de la ONU para refugiados palestinos (UNRWA), la principal fuente de ayuda en Gaza. La nueva legislación corta los lazos de Israel con la agencia y restringe su operación, lo que genera preocupación sobre el futuro de los servicios básicos que brinda en Gaza y Cisjordania.

Tensiones internacionales
En el ámbito diplomático, el primer ministro británico, Keir Starmer, se reunió el lunes en Londres con su homólogo libanés para expresar condolencias por las víctimas libanesas tras los ataques en la región, mientras el Ministerio de Salud del Líbano informa más de 2,700 muertos y 12,600 heridos desde el 8 de octubre, cuando estallaron los enfrentamientos entre Hezbolá e Israel.

Por su parte, Irán ha anunciado que responderá "de manera apropiada" tras el ataque israelí a instalaciones militares iraníes. Estados Unidos, en un intento por reducir la tensión, advirtió que tomará "severas consecuencias" si Irán ataca a personal israelí o estadounidense en la región.