El esperado duelo entre las selecciones de Perú y Chile, correspondiente a la fecha 11 de las Eliminatorias Sudamericanas para el Mundial 2026, no se disputará en el Estadio Nacional, como se había planeado inicialmente. El Gobierno, a través del Ministerio del Interior, denegó las garantías de seguridad necesarias para llevar a cabo el partido en dicho estadio, citando preocupaciones de orden público y la coincidencia con el evento APEC en Lima.

En consecuencia, el clásico del Pacífico se jugaría en el Estadio Monumental, hogar de Universitario de Deportes, aunque aún no ha sido confirmado oficialmente por la Federación Peruana de Fútbol (FPF). La decisión de cambiar de sede surge después de que la FPF volviera a solicitar las garantías para el Estadio Nacional, solicitud que fue rechazada por el ministerio correspondiente.

La situación de ambos equipos en la tabla
Este encuentro tiene una gran importancia para ambos equipos, ya que la selección peruana se encuentra en el penúltimo lugar de la clasificación con 6 puntos, mientras que Chile ocupa el último puesto con 5. La ‘bicolor’ dirigida por Jorge Fossati necesita sumar de a tres para superar a la ‘roja’ y mejorar su posición en las clasificatorias.

El Ministerio del Interior justifica su negativa
La resolución oficial del Ministerio del Interior explica que no se puede otorgar las garantías necesarias para el partido en el Estadio Nacional debido a razones de seguridad y el riesgo de afectar el desarrollo del APEC, que se celebrará en Lima en las mismas fechas. El ministerio también ha propuesto que el encuentro se realice en un estadio más alejado del centro de la ciudad, lo que ha llevado a la FPF a considerar el Estadio Monumental como opción.

¿Por qué el cambio de sede?
El último 7 de noviembre, el ministro de la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM) indicó que se estaba evaluando el traslado del partido a otro lugar para evitar posibles complicaciones por la realización del APEC en Lima. Según el primer ministro, el Estadio Nacional, al ser un lugar céntrico, podría generar inconvenientes en términos de seguridad y logística.

Este cambio de sede ha generado controversia, especialmente entre los aficionados que esperaban vivir el esperado clásico en el Estadio Nacional. Sin embargo, la prioridad del Gobierno ha sido asegurar el orden público ante la proximidad de dos grandes eventos internacionales.