La permanencia de Julio Demartini como ministro de Desarrollo e Inclusión Social está en suspenso tras el escándalo de corrupción que involucra al programa estatal Qali Warma. Legisladores de diversas bancadas han presentado una moción de interpelación y una censura en su contra debido a la grave crisis que ha afectado la salud de miles de niños en el país.

El caso, que destapó una red criminal vinculada a la distribución de alimentos en mal estado, ha generado indignación en el Congreso y en la sociedad. Los parlamentarios exigen la renuncia inmediata de Demartini, asegurando que su falta de control y supervisión en el programa ha permitido que se repitan irregularidades graves que ponen en riesgo la alimentación de los niños más vulnerables.

Interpelación y censura contra Demartini

El 21 de noviembre de 2024, diversos congresistas de partidos como Bloque Democrático Popular, Podemos Perú, Perú Libre y Acción Popular presentaron una moción de censura e interpelación, argumentando que el ministro no ha cumplido con su deber de fiscalizar correctamente los programas alimentarios. "El ministro no ha mostrado el celo ni la diligencia necesarios para velar por los programas que alimentan a los niños más pobres", indicaron los legisladores.

En la moción de interpelación, impulsada por el parlamentario Héctor Valer, se incluyen 14 preguntas clave sobre el manejo de los casos de intoxicación alimentaria y el vínculo de la empresa "Frigoinca" con el escándalo. Los cuestionamientos apuntan a la falta de respuestas claras del ministerio ante los incidentes y la alta rotación de directores ejecutivos en el programa Qali Warma.

El ministro responde

A pesar de la presión política, Julio Demartini ha rechazado su renuncia. En una entrevista con Canal N, el titular del Midis asumió la responsabilidad política por las fallas en el programa Qali Warma, pero enfatizó que continuará trabajando para corregir los problemas y reestructurar el programa. Además, aseguró que ha separado y denunciado a 10 funcionarios involucrados en los hechos irregulares.

El impacto del escándalo en la salud infantil

La crisis de Qali Warma ha dejado serias consecuencias en la salud de los niños beneficiarios del programa, como el caso de más de 20 menores intoxicados por conservas defectuosas en Puno. La denuncia de la venta de carne de caballo en productos destinados a los colegios generó un fuerte rechazo en la opinión pública y puso en evidencia las deficiencias en el control y supervisión del programa.

El escándalo continúa desarrollándose, y los congresistas insisten en que Demartini debe asumir su responsabilidad y dar un paso al costado para garantizar que el programa Qali Warma cumpla con su misión de alimentar a los niños más pobres del país sin comprometer su salud.