El cruce de declaraciones entre Alberto Otárola y Juan José Santiváñez ha encendido la polémica en la política peruana. En una contundente respuesta en su cuenta de X, el ex presidente del Consejo de Ministros, Otárola, rechazó las acusaciones de deslealtad que le lanzó el ministro del Interior. "Decir la verdad no es ser desleal", afirmó Otárola, quien añadió que "acorralar y traicionar a buenos policías, implementar seguimientos ilegales y aferrarse al cargo ante un rotundo fracaso en la gestión, eso sí es deslealtad".

El ex premier se refería a los recientes cuestionamientos sobre la desactivación del Equipo Especial de la Policía Nacional del Perú (PNP), que apoyaba la lucha contra la corrupción en el país, y al incumplimiento de la promesa de Santiváñez de renunciar si el estado de emergencia no daba resultados. Otárola aprovechó para recordarle al país que su gestión estuvo marcada por una defensa de los buenos oficiales de la PNP.

Por su parte, el ministro Santiváñez había rechazado previamente las críticas de Otárola, calificando sus palabras como "comentarios de alguien desleal". En declaraciones a los medios, el titular del Mininter se mostró distante de los señalamientos, aclarando que no abordaría más el tema de los "desleales", sin entrar en más detalles sobre el proceso quirúrgico de la presidenta Dina Boluarte.

El enfrentamiento ha tocado varios puntos sensibles dentro del Ejecutivo, especialmente en torno al manejo de la seguridad y las dudas sobre un presunto vacío de poder durante la operación de la presidenta. Gustavo Adrianzén, secretario de la presidencia, también intervino para defender la gestión de Boluarte, asegurando que nunca se dejó de cumplir con las funciones del Estado y calificando de "bajeza" las afirmaciones sobre la salud de la mandataria.

Este tenso cruce de acusaciones pone de manifiesto las profundas divisiones en el Gobierno, mientras la opinión pública sigue expectante ante los desarrollos de esta polémica.