Actualidad | 11 dic 2024
Revelan que jefe de Migraciones estuvo implicado en fuga de César Hinostroza
El actual jefe de la Superintendencia Nacional de Migraciones, Armando García, estuvo implicado en la fuga de César Hinostroza en 2018. Además, la sobrina del exjuez, Jenny Gutiérrez, trabajaba en Migraciones en el mismo periodo.
El actual jefe de Migraciones, Armando García, está vinculado a la fuga de César Hinostroza, el exjuez supremo acusado de liderar la organización criminal ‘Los Cuellos Blancos del Puerto’. Según un informe difundido por el programa Beto a Saber, García fue director de operaciones en Tumbes en 2018, donde Hinostroza huyó a Ecuador y luego a España. Durante el escape, una funcionaria de Migraciones lo ayudó a evitar el control migratorio, y las cámaras de seguridad fueron las únicas que registraron su huida.
El exjuez, quien estaba enfrentando una orden de prisión preventiva de 36 meses, logró cruzar la frontera sin que se registrara su salida en el sistema informático de Migraciones. Además, el informe revela que la sobrina de Hinostroza, Jenny Gutiérrez, trabajaba en Migraciones en el mismo periodo, específicamente en el puesto de control de Tumbes, donde permaneció hasta octubre de 2018, justo antes de la fuga de su tío.
Fuga y consecuencias
Hinostroza, destituido e inhabilitado por su implicación en una red de corrupción, escapó del país en octubre de 2018, tras entregar 10,000 dólares a una funcionaria de Migraciones para evitar la alarma de salida. Aunque el exjuez reapareció en España y fue captado en Bélgica en 2022, no ha sido extraditado a Perú, a pesar de los esfuerzos por su captura.
En España, las autoridades rechazaron varias solicitudes de extradición, aunque el gobierno español finalmente aprobó su entrega en 2020. Sin embargo, la entrega está pendiente debido a su recurso contra la denegación de asilo en ese país. Mientras tanto, en Bélgica, Hinostroza continúa sin ser detenido.
Este caso ha puesto de relieve la corrupción dentro de las entidades migratorias y la vinculación de funcionarios con organizaciones criminales, lo que plantea dudas sobre el control y la seguridad en los puntos de control migratorio en el país.