Andrés Hurtado, conocido presentador de televisión, conocerá este viernes 20 de diciembre si pasará Navidad y Año Nuevo en prisión o en libertad, mientras sigue enfrentando cargos por tráfico de influencias, lavado de activos y sobornos. La audiencia, que se llevará a cabo a las 11:00 horas, evaluará la solicitud de la defensa del conductor, quien pide que se le reemplace la prisión preventiva de 18 meses por arresto domiciliario o, en su defecto, la colocación de un grillete electrónico.

El pedido de la defensa de Hurtado incluye argumentos de que no se han presentado pruebas suficientes sobre su implicación en los delitos, lo que justificaría una medida cautelar menos estricta. Además, el conductor ha solicitado cumplir su arresto domiciliario en una vivienda que, según su equipo legal, cumple con todos los requisitos legales, incluyendo la validación notarial del contrato de arrendamiento. En su solicitud, Hurtado también resalta que su hija menor, quien tiene habilidades especiales, depende de su presencia.

La defensa de Hurtado, encabezada por Elio Riera, ha sumado un nuevo abogado al equipo: Russell Robles. Este cambio busca encontrar una alternativa a la prisión preventiva, ya que, según Riera, aún se debe evaluar la responsabilidad penal de su cliente en un juicio posterior. "Lo que discuto es si debe seguir preso cuando tiene una hija menor de edad y existen otras medidas menos gravosas", indicó Riera en Canal N.

El caso de Hurtado se ha complicado debido al testimonio de Iván Siucho, quien asegura que el empresario Javier Miu Lei entregó US$500,000 para sobornar a la fiscal especializada en lavado de activos, Elizabeth Peralta, también encarcelada. Aunque la cifra del soborno está en disputa, la versión más reciente apunta a que el monto total podría haber sido de hasta US$1 millón.

Por el momento, Hurtado ha decidido no acogerse a la figura de colaboración eficaz, aunque mantiene la esperanza de que un "milagro de Navidad" le permita salir de prisión. Además, su defensa presentó un habeas corpus buscando la nulidad de la medida cautelar que lo mantiene detenido desde el 2 de octubre. Sin embargo, este proceso podría prolongarse hasta seis meses si es que llega al Tribunal Constitucional.

Riera también destacó que, aunque Hurtado no es colaborador eficaz, ha proporcionado información sobre otros implicados en el caso, como la exjefa de la Superintendencia Nacional de Migraciones, Roxana del Águila, y María Vidal La Rosa Sánchez, presidenta de la suspendida Corte Superior de Justicia de Lima.

Con todo esto, la audiencia del 20 de diciembre será clave para determinar si Andrés Hurtado pasará las fiestas en libertad o continuará detenido mientras enfrenta los graves cargos que se le imputan.