Salud | 26 dic 2024
Emergencia ambiental por derrame de petróleo: playas de Piura afectadas por 90 días
El gobierno de Dina Boluarte declara emergencia ambiental en seis playas de Piura afectadas por el derrame de 10,000 metros cúbicos de petróleo, y se implementarán medidas para mitigar el daño en la zona.
El gobierno de la presidenta Dina Boluarte ha declarado estado de emergencia ambiental en seis playas de Piura, afectadas por un derrame de petróleo proveniente de actividades de la refinería de Talara, administrada por Petroperú. La fuga de hidrocarburos ocurrió frente a la playa ‘Las Capullanas’ y afectó gravemente al ecosistema marino, contaminando aproximadamente 10,000 metros cúbicos del mar.
La resolución ministerial, firmada por el titular del Ministerio del Ambiente, Juan Carlos Castro Vargas, establece que las playas San Pedro, Punta Malacas, Las Capullanas, Baterías, Peña Negra y Cabo Blanco estarán en emergencia ambiental durante un periodo de 90 días. Esta medida permitirá que diversas entidades del Estado, en coordinación con el gobierno local de Lobitos y el Gobierno Regional de Piura, ejecuten un Plan de Acción Inmediato y a Corto Plazo para abordar la emergencia.
Acciones inmediatas para mitigar el impacto
Dentro de las acciones contempladas en el plan, Petroperú continuará con la limpieza de las playas afectadas, aunque la empresa estatal había anunciado que los trabajos de limpieza ya habían concluido el 24 de diciembre. Sin embargo, el Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA) se encargará de emitir informes de supervisión y evaluación en un plazo de 80 días hábiles para verificar la efectividad de las labores de limpieza.
Por otro lado, el Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado (Sernanp) y la Autoridad Nacional del Agua (ANA) realizarán reportes sobre la calidad del agua y el estado del mar, mientras que el Instituto del Mar del Perú (Imarpe) y el Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (Serfor) monitorearán la fauna en la zona afectada.
Impacto ambiental del derrame
El derrame de petróleo ha causado un gran daño a la biodiversidad marina y costera. La capa de hidrocarburo en la superficie del agua impide que los rayos del sol lleguen al fitoplancton, base de la cadena alimentaria marina, lo que afecta gravemente a las especies que dependen de él, como peces, crustáceos y moluscos. Además, el petróleo que se hunde en el fondo marino altera las condiciones químicas y físicas del hábitat, afectando a organismos bentónicos, esenciales para la limpieza del lecho marino y la redistribución de nutrientes.
A pesar de los esfuerzos de limpieza, la recuperación total de las playas y el ecosistema marino afectado podría llevar décadas. En casos similares, como el derrame del Exxon Valdez en Alaska, se estima que la regeneración completa de los hábitats afectados podría tomar más de 30 años, dependiendo de la intensidad del daño y los esfuerzos de restauración. La situación sigue siendo preocupante para las comunidades locales y los pescadores, quienes enfrentan graves problemas económicos y ambientales debido a la contaminación de las aguas.
Este derrame subraya la vulnerabilidad de las costas peruanas ante los incidentes industriales y plantea nuevos desafíos para la protección del medio ambiente en el país. Las autoridades, junto con Petroperú y otros organismos, continúan trabajando para mitigar el daño y restaurar los ecosistemas afectados.