Mundo | 27 dic 2024
El Parlamento surcoreano destituye al presidente interino, agudizando la crisis institucional
El Parlamento surcoreano aprobó la destitución de Han Duck-soo, presidente interino desde hace dos semanas, lo que desata una nueva ola de incertidumbre política en el país tras la reciente declaración de la ley marcial.
El Parlamento de Corea del Sur aprobó este viernes una moción presentada por la oposición que destituye al presidente interino Han Duck-soo, quien había asumido el cargo hace apenas dos semanas tras la destitución de Yoon Suk-yeol. La moción fue aprobada por 192 votos a favor, un número que corresponde al total de escaños de la oposición, mientras que el Partido del Poder Popular (PPP), que apoya al gobierno, boicoteó la votación. Esta destitución representa un hito histórico, siendo la primera vez en democracia que Corea del Sur cesa a un presidente interino.
En su comunicado, Han expresó su respeto por la decisión del Parlamento, pero aseguró que suspendería sus funciones conforme a la ley y esperaría una pronta decisión del Tribunal Constitucional, que ahora deberá ratificar o anular su cese.
El ministro de Finanzas y vice primer ministro, Choi Sang-mok, asumirá de manera provisional el cargo de presidente interino hasta que se resuelva la crisis política que atraviesa el país.
El conflicto por el cese de Han
La destitución de Han fue impulsada por el principal partido de oposición, el Partido Democrático (PD), después de que Han se negara a aprobar el nombramiento de nuevos jueces para el Tribunal Constitucional, a pesar de las demandas de la oposición. El PD había exigido que se cubrieran las vacantes en el tribunal, cuyas funciones son cruciales para resolver los conflictos legales sobre la ley marcial y la constitucionalidad de las decisiones del gobierno.
El PPP, por su parte, criticó el proceso de destitución, argumentando que se debía aplicar un umbral más alto para la votación, similar al procedimiento utilizado para destituir a un presidente electo. Según los legisladores del PPP, se debería haber requerido una mayoría de dos tercios en lugar de la mayoría simple que se utilizó para votar la moción. Sin embargo, el PD defendió que, al tratarse de un presidente interino, el procedimiento debía ajustarse a las normativas estándar para destituir a miembros del gabinete.
Implicaciones políticas y judiciales
El Tribunal Constitucional, que está actualmente evaluando la declaración de la ley marcial hecha por Yoon Suk-yeol a principios de diciembre, tendrá que decidir si ratifica o no la destitución de Han. Esta decisión podría acelerar aún más la crisis política, pues la oposición busca asegurar que el gobierno de Yoon sea finalmente destituido y se convoquen elecciones presidenciales anticipadas, donde el PD podría tener un claro favoritismo.
A pesar de las tensiones políticas internas, la situación también pone de manifiesto la creciente polarización en el país y el creciente desgaste de las instituciones democráticas. Con las vacantes en el Tribunal Constitucional aún sin cubrir y los procesos judiciales en curso contra varios líderes políticos, el futuro político de Corea del Sur parece estar envuelto en una incertidumbre aún mayor. La oposición promete continuar presionando al gobierno para que se renueven las altas cortes y se investiguen posibles irregularidades en el manejo de la ley marcial y otras decisiones controvertidas del presidente saliente.
La crisis institucional está lejos de resolverse y podría prolongarse en los próximos meses, afectando tanto la estabilidad interna del país como su imagen a nivel internacional.