La Plataforma Unitaria Democrática (PUD), principal coalición opositora de Venezuela, denunció este viernes que la juramentación de Nicolás Maduro como presidente de Venezuela para el periodo 2025-2031 es un "golpe de Estado". El acto fue llevado a cabo por la Asamblea Nacional, dominada por el chavismo, pese a las acusaciones de fraude electoral y al rechazo de la oposición que considera que Edmundo González Urrutia fue el verdadero ganador de las elecciones presidenciales de julio pasado.

En un comunicado publicado en X, la PUD expresó que la "usurpación del poder" por parte de Maduro, respaldado por la fuerza militar, ignora la soberanía popular expresada en las urnas. "Con la usurpación del poder por parte de Nicolás Maduro, se ha consumado un golpe de Estado en contra de los derechos del pueblo venezolano", afirmó la coalición, que subraya la necesidad de continuar luchando por la libertad y la democracia en Venezuela.

La oposición sostiene que González Urrutia debe ser reconocido como el "presidente legítimo" de Venezuela, ya que, según afirman, la mayoría de los votantes del país apoyaron su candidatura. El bloque opositor asegura que ha reunido el 85% de las actas electorales como prueba del triunfo de González Urrutia, cuya candidatura ha sido respaldada por testigos y miembros de mesa que trabajaron en las elecciones. Estos documentos han sido publicados en línea, pero el oficialismo ha calificado esta evidencia como "falsa".

Maduro, por su parte, fue juramentado en un acto solemne al que asistieron altos funcionarios del régimen, como el fiscal general Tarek William Saab, la presidenta del Tribunal Supremo de Justicia Caryslia Rodríguez, el presidente del Consejo Nacional Electoral (CNE) y el ministro de Defensa Vladimir Padrino López. Durante su discurso, el mandatario chavista aseguró que su gobierno inaugurará un "nuevo periodo de la paz, la prosperidad y la nueva democracia", mientras que la oposición sigue reclamando el respeto a los resultados electorales.

El CNE proclamó a Maduro como ganador de las elecciones, pero hasta la fecha no ha publicado los resultados desagregados, como estaba previsto. La controversia sobre los comicios sigue intensificándose, mientras el país se enfrenta a una nueva etapa de polarización política y social.

La situación sigue siendo tensa, y el futuro político de Venezuela se ve incierto, con la oposición prometiendo continuar su lucha para que se respete la Constitución y la soberanía popular.