Este lunes, Estados Unidos suspendió temporalmente las operaciones cibernéticas ofensivas contra Rusia, según un alto funcionario estadounidense que habló en exclusiva con CNN. La pausa, que afecta directamente al Comando Cibernético de EE. UU., ha sido descrita como un "duro golpe" para la planificación de operaciones futuras, ya que este tipo de acciones requiere una investigación y preparación exhaustivas.

La preocupación principal es que la suspensión de estas operaciones podría hacer más vulnerable a Estados Unidos a los ciberataques de Rusia, que cuenta con un avanzado grupo de hackers capaces de afectar infraestructuras críticas y obtener inteligencia sensible. Esta decisión llega en un contexto de tensiones crecientes, ya que la administración Trump intenta mejorar los lazos con Rusia en un momento de alta incertidumbre.

En medio de esta situación, el presidente Donald Trump y el vicepresidente J.D. Vance expresaron críticas al presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, lo que ha generado dudas sobre el futuro de las relaciones entre Estados Unidos y Ucrania.

Según un alto funcionario de defensa, “no hay mayor prioridad para el secretario Hegseth que la seguridad del combatiente en todas las operaciones, incluyendo el dominio cibernético”. Sin embargo, el Comando Cibernético ha pausado las operaciones de ciberefecto debido a que, a menudo, el Pentágono detiene actividades potencialmente provocadoras para negociar.

Jason Kikta, exfuncionario del Mando Cibernético, destacó que cualquier periodo prolongado sin actualizar la planificación o verificar el acceso a sistemas podría hacer que las opciones ofensivas se volvieran obsoletas. Los expertos señalan que Rusia y EE.UU. mantienen un enfrentamiento constante en el ciberespacio, con Moscú utilizando ciberataques para influir en las elecciones y dañar la infraestructura estadounidense.

Desde el establecimiento del Comando Cibernético hace más de una década, EE. UU. ha intensificado sus esfuerzos para defenderse de amenazas cibernéticas de potencias extranjeras, especialmente de Rusia. A pesar de la pausa en las operaciones ofensivas, la Agencia de Ciberseguridad y Seguridad de Infraestructuras de EE.UU. aclaró que su misión de proteger las infraestructuras críticas sigue sin alterarse.