

La fiscal de la Nación, Delia Espinoza, reveló que la presidenta Dina Boluarte enfrenta 34 denuncias en su contra, en su mayoría presentadas por ciudadanos peruanos. En una entrevista con Cuarto Poder, Espinoza aclaró que la presidenta solo ha sido llamada a declarar cuando es estrictamente necesario para el esclarecimiento de las investigaciones, y que en los demás casos se están recabando documentos, testigos y pericias.
Espinoza negó las acusaciones de acoso político o hostigamiento contra Boluarte, desmintiendo así la versión de la presidenta, quien el pasado 3 de marzo afirmó que se estaba intentando realizar un golpe de Estado blando en su contra. "Toda persona denunciada, al ser investigada, suele ponerse tensa y puede decir cualquier cosa", señaló la fiscal, quien explicó que su trabajo es constitucional y que está obligada a perseguir los presuntos delitos de los más altos funcionarios.
Espinoza también se pronunció sobre la denuncia constitucional interpuesta en su contra por presunto abuso de autoridad. La denuncia busca su inhabilitación por diez años, después de que la fiscal acusara a 11 congresistas por aprobar un dictamen que favoreció a legisladores militares y policías retirados, permitiéndoles cobrar simultáneamente sueldo y pensión sin restricciones.
"No tengo temor, porque sé lo que he hecho y tengo la conciencia tranquila", afirmó Espinoza, quien añadió que lo que realmente le preocupa es que los votos prevalezcan sobre la razón del derecho. "Si me van a acusar y quieren inhabilitarme, así como yo sustenté una denuncia constitucional motivada, ellos tienen que hacer lo propio", subrayó.
Este intercambio entre la fiscalía y la presidencia pone de manifiesto la tensión política y legal en la que se encuentra el país, mientras las investigaciones siguen su curso en torno a las denuncias contra la presidenta Dina Boluarte.