

El partido de vuelta de octavos de final de la Liga de Campeones entre el Atlético de Madrid y el Real Madrid, que se disputará este miércoles en el Estadio Metropolitano, contará con un dispositivo de seguridad excepcional. La Policía Nacional desplegará más de 550 agentes de diversas unidades para garantizar el orden y la seguridad de los 69.000 aficionados que se esperan en el estadio, con especial atención a prevenir conductas de odio, racismo y violencia.
Desde la tarde, agentes de Unidades de Intervención Policial (UIP), Caballería, Subsuelo, Unidades de Prevención y Reacción, Brigada Móvil, y Brigada Provincial de Información se encargarán de vigilar tanto el interior como el exterior del estadio. Además, helicópteros y drones estarán operando en el aire para mantener la vigilancia y detectar cualquier posible incidente. El sistema ‘antidrones’ se encargará de neutralizar cualquier objeto volador no autorizado en las cercanías del estadio.
La Policía Nacional ha advertido que las conductas de odio, racismo o violencia pueden ser constitutivas de delito, lo que podría resultar en la detención de los infractores. Además, dentro del estadio, agentes estarán monitorizando las cámaras de seguridad para identificar cualquier comportamiento inapropiado. Cualquier comportamiento de este tipo puede conllevar la expulsión del estadio e incluso el arresto.
La portavoz de la policía, María Muñoz, destacó la importancia de respetar al rival y recordó las restricciones en cuanto a acceso con bebidas alcohólicas, armas, objetos contundentes, bengalas y artefactos pirotécnicos. Se ha recomendado llegar con antelación para facilitar el paso por los controles de seguridad.
Este dispositivo de seguridad forma parte de un plan global organizado por la Delegación del Gobierno, que involucra un total de 1.500 efectivos, entre ellos miembros de la Guardia Civil, Policía Municipal de Madrid, agentes de Movilidad, Samur-Protección Civil, bomberos, Cruz Roja y vigilantes de seguridad del club rojiblanco. Además, se reforzará la presencia de seguridad en el Metro de Madrid para asegurar la seguridad en el transporte público.
Con la asistencia de miles de aficionados, la seguridad será clave para evitar cualquier altercado y garantizar que el partido de Champions League entre Atlético de Madrid y Real Madrid se desarrolle de manera tranquila. La policía mantiene un control exhaustivo sobre el entorno, con medidas de seguridad reforzadas tanto en el interior como en los alrededores del estadio.