

Las autoridades israelíes liberaron este martes a Hamdam Ballal, uno de los directores palestinos del documental ganador del Óscar ‘No Other Land’, tras una noche detenido en una base militar. Ballal había sido arrestado tras ser brutalmente agredido por un grupo de colonos israelíes en la localidad de Susiya, en el sur de Cisjordania, donde reside.
El ataque ocurrió la tarde del lunes, cuando colonos israelíes, armados con porras, cuchillos y rifles, invadieron la aldea palestina, hiriendo a varias personas y destruyendo propiedades. Durante el ataque, Ballal fue golpeado severamente, resultando con sangre e hinchazón en su cuerpo. Mientras los paramédicos lo atendían, las fuerzas israelíes lo arrestaron, junto con otro palestino, en un incidente que ha generado gran indignación.
Según testigos, el grupo de colonos estaba enmascarado y utilizó piedras para destrozar el vehículo de activistas judíos estadounidenses que intentaron documentar el ataque. La productora del documental detalló que Ballal quedó herido en el asalto y, mientras recibía atención médica, fue arrestado por el ejército israelí.
El documental ‘No Other Land’ ha sido objeto de controversia en Israel. Esta película, que cubre cinco años de vida en la región de Masafer Yatta (en Cisjordania), muestra las demoliciones de viviendas y la destrucción de infraestructuras palestinas por parte del Ejército israelí. La película fue galardonada con el Óscar al Mejor Documental el pasado mes de marzo, pero su proyección en Israel se ha visto obstaculizada por las autoridades. El ministro israelí de Cultura, Miki Zohar, había pedido a los cines que no la exhibieran, pero a pesar de esto, activistas palestinos e israelíes han seguido organizando proyecciones en Tel Aviv y otras ciudades.
El ataque a Ballal y su posterior detención resalta las tensiones en la región de Cisjordania, particularmente en áreas como Masafer Yatta, donde los palestinos han sido objeto de frecuentes agresiones y despojos de sus tierras. La situación también pone de manifiesto las crecientes restricciones a la libertad de expresión en torno a temas como la ocupación israelí, especialmente en el contexto de un documental que denuncia estas prácticas.
Tras su liberación, Ballal se reunirá con su familia, mientras la comunidad internacional observa de cerca el caso, que añade una nueva capa de complejidad a las relaciones entre Israel y Palestina.