

Después de casi diez años prófugo, Harold Huancas León, implicado en un brutal robo con resultado de muerte en Chiclayo, fue detenido en Santiago de Chile, en una operación coordinada entre la Policía Nacional del Perú (PNP), Interpol y autoridades judiciales chilenas.
La captura se realizó el viernes 11 de abril, a la 1:00 p.m. (hora peruana), en el distrito de Quilicura, al norte de la capital chilena. El arresto fue posible gracias a una notificación roja de Interpol y a una estrategia de inteligencia desplegada entre el 1 y el 10 de abril.
Huancas León es un ciudadano peruano con antecedentes por delitos violentos y tenía una orden de captura internacional desde 2015, cuando fue acusado del asesinato de Dante Fernández Delgado, joven empresario chiclayano.
El crimen ocurrió la madrugada del 26 de mayo de 2015 en una cabina de internet ubicada en el distrito de José Leonardo Ortiz. Según la fiscalía, Huancas y otros dos hombres irrumpieron armados para robar. Al intentar evitar la fuga, Fernández fue asesinado de un disparo a quemarropa.
Tras el ataque, Huancas León desapareció sin dejar rastro, burlando a la justicia peruana por años.
Actualmente, Huancas León está bajo custodia de la justicia chilena, a la espera de una audiencia de control ante el Segundo Juzgado de Garantía de Santiago. Según fuentes fiscales, el proceso de extradición podría tomar semanas o meses, dependiendo de los trámites judiciales bilaterales.
El Ministerio Público chileno evaluará la solicitud y evidencias enviadas desde Perú antes de autorizar su traslado para que enfrente cargos por robo agravado con consecuencia de muerte.
La detención fue el resultado de una coordinación estrecha entre la OCN de Interpol Santiago, el agregado policial peruano en la embajada en Chile, y la Unidad de Cooperación Internacional de la Fiscalía Nacional chilena, además de Interpol Lima y la Fiscalía peruana.
El coronel Víctor Revoredo, especialista en crimen organizado, fue pieza clave en el trabajo de campo y la recolección de inteligencia para ubicar al fugitivo.
Las autoridades peruanas han resaltado que esta operación demuestra el compromiso del Estado en la lucha contra la impunidad, reafirmando que los crímenes graves no prescriben ni conocen fronteras.
Con esta captura, el caso del asesinato de Dante Fernández podría finalmente cerrar un capítulo pendiente para su familia y para la justicia peruana.