

El expresidente Ollanta Humala fue trasladado e internado en la madrugada de este miércoles en el penal de Barbadillo, ubicado en el distrito limeño de Ate. El exjefe de Estado deberá cumplir una condena de 15 años de prisión efectiva por el delito de lavado de activos agravado, tras un adelanto de sentencia dictado por el Tercer Juzgado Penal Colegiado Nacional.
El fallo lo responsabiliza, junto a su esposa Nadine Heredia, de recibir fondos ilícitos del expresidente venezolano Hugo Chávez y de la constructora brasileña Odebrecht para financiar las campañas del Partido Nacionalista en 2006 y 2011.
El Instituto Nacional Penitenciario (INPE) confirmó su reclusión en Barbadillo, donde ya están internos los también expresidentes Alejandro Toledo y Pedro Castillo. A través de su cuenta oficial en X (antes Twitter), el INPE aseguró que se garantizarán los derechos fundamentales del exmandatario y el cumplimiento estricto del régimen penitenciario.
Humala fue trasladado al penal cerca de las 3:00 a.m., luego de más de siete horas de diligencias en la sede del Poder Judicial, en el edificio Carlos Zavala Loayza, en el Cercado de Lima, donde estuvo presente durante la lectura del fallo anticipado.
No es la primera vez que el exmandatario pisa el penal de Barbadillo. Durante las investigaciones iniciales del caso de los aportes irregulares, Humala ya cumplió una etapa de prisión preventiva en ese mismo establecimiento.
El caso Humala-Heredia marca un nuevo hito en la larga lista de expresidentes peruanos con cuentas pendientes con la justicia, y evidencia una vez más la profundidad de la corrupción política que ha golpeado al país en las últimas décadas.