

Desde el penal Barbadillo, donde cumple 15 años de prisión por lavado de activos, el exmandatario compartió un mensaje en su cuenta de X (antes Twitter):
“El asilo que Brasil ha otorgado a Nadine y a mi hijo es un acto político y humanitario, amparado en el derecho internacional, que agradezco”.
Humala sostuvo que el asilo se produce en un contexto de “ensañamiento” judicial en contra de su entorno familiar, que considera una forma de persecución política:
“Mi familia no merece este ensañamiento que utiliza a los organismos de justicia para una persecución política.”
Recordó además un episodio previo en el que sus hijos quedaron sin padre ni madre debido a una medida que calificó como inconstitucional:
“Ya una vez mis hijos se quedaron sin padre y sin madre. Otra vez, no.”
En su mensaje, el expresidente también ratificó que continuará su defensa legal, apelando a la legitimidad del proceso:
“Seguiremos defendiendo nuestra inocencia y honor con pruebas, como se hace en un estado de derecho que se respete.”