

El fallecimiento del papa Francisco el pasado 21 de abril ha reconfigurado el mapa del poder en la Iglesia Católica, activando el protocolo de sucesión. Este miércoles 7 de mayo, 135 cardenales electores se reunirán en la Capilla Sixtina para decidir quién ocupará el trono de San Pedro.
Y mientras el humo blanco aún no aparece, las casas de apuestas ya tienen dos favoritos claros: el italiano Pietro Parolin, actual Secretario de Estado del Vaticano, y el filipino Luis Antonio Tagle, Prefecto para la Evangelización de los Pueblos.
Con 70 años y una vasta carrera en la diplomacia vaticana, Pietro Parolin lidera las apuestas en plataformas como William Hill y Sportium, con cuotas cercanas al 2.75. Su perfil moderado y conciliador, junto con su cercanía a las estructuras del poder eclesiástico, lo convierten en un candidato de equilibrio, ideal para unir a las alas conservadora y progresista del Vaticano.
Por otro lado, el cardenal filipino Tagle, considerado el “Francisco asiático”, destaca por su enfoque teológico progresista y su carisma. Sus cuotas rondan entre 3.20 y 4.5, y su elección marcaría un hito histórico como el primer papa asiático moderno, en sintonía con el crecimiento del catolicismo en Asia.
Matteo Zuppi, arzobispo de Bolonia, es conocido por su enfoque pastoral y aparece como opción secundaria con cuotas de 7.5 a 8.0.
Peter Turkson, de Ghana, representa a África y se perfila con cuotas de hasta 10.0, lo que haría de él el primer papa subsahariano si fuera elegido.
Peter Erdo, conservador húngaro, cuenta con apoyo desde Europa del Este, con cuotas de 8/1 a 10.0.
El peso global de la Iglesia ha cambiado: África, Asia y América Latina crecen, mientras Europa pierde fieles. Esta tendencia podría impulsar un papa no europeo, continuando la internacionalización iniciada por Francisco.
El Colegio Cardenalicio debe decidir entre mantener el legado reformista del papa argentino o virar hacia posiciones más tradicionales. Parolin y Tagle representan dos estilos de continuidad: el primero, más institucional; el segundo, más pastoral y global.
Con un cónclave descrito como polarizado y diverso, la figura que logre consenso será clave. Candidatos moderados como Parolin o carismáticos como Tagle tienen ventaja por su capacidad de tender puentes.
Las casas de apuestas también ofrecen mercados alternativos, como:
Duración del cónclave (¿será rápido o se extenderá varios días?).
Nombre papal elegido (Francisco II, Juan Pablo III, etc.).
Región de origen del nuevo Papa (Asia, Europa, América, África).
El cónclave del 7 de mayo no solo elegirá al nuevo líder espiritual de 1.300 millones de católicos, sino que marcará el rumbo ideológico y geográfico de la Iglesia para las próximas décadas. Las cartas están sobre la mesa, y las apuestas no mienten: la decisión está entre Roma y Manila.