

Una disputa por derechos de autor ha encendido la escena del rock peruano. Edgar Guerra, fundador y principal compositor de la banda TK, logró un fallo a su favor del Instituto Nacional de Defensa de la Competencia y de la Protección de la Propiedad Intelectual (Indecopi) tras denunciar al cantante Diego Dibós por la explotación sin autorización de sus obras musicales.
La resolución, emitida en 2025, ordena una sanción de más de 20 UIT (equivalente a más de 100 mil soles) contra Dibós y marca un precedente clave en la protección de la propiedad intelectual en la industria musical del país.
En el podcast ‘Nadie se salva’, Guerra compartió detalles de la denuncia que presentó en 2022, explicando que muchos de los grandes éxitos de TK —como “Alas cortadas”, “Abril”, “Ángel”, “Aquellos que nunca quisieron”, entre otros— fueron compuestos en solitario, sin participación de Dibós.
"Yo compuse un montón de hits en TK. Nunca componíamos juntos", señaló Guerra, subrayando que registró formalmente todas las canciones a su nombre ante Indecopi.
¡Rambo regresa al cine! Precuela sobre los orígenes del icónico héroe de acción iniciará rodaje en octubre
La denuncia surgió luego de que Guerra detectara que sus canciones estaban siendo comercializadas en plataformas digitales como Spotify y Apple Music sin su autorización ni pago alguno de regalías.
Las obras estaban siendo distribuidas por Sinergia, una empresa formada por Diego Dibós y George Schofield, junto a la distribuidora Altaforte.
"Nadie puede subir música sin la autorización del autor. Me encontré con Diego y me dijo: ‘Búscate un abogado’. Eso hice", relató Guerra.
La resolución de Indecopi establece que Dibós infringió el principio de respeto a la autoría, imponiéndole una multa de más de 100 mil soles, además de ordenar el retiro de los temas de las plataformas digitales. Aunque el dinero de la sanción va al Estado, Guerra espera una compensación adicional por la explotación comercial de sus obras.
"Esto sienta un precedente. No se puede explotar la obra de otro y salir impune. No es por venganza, es por justicia", declaró el músico.
Pese al fallo en su contra, Diego Dibós aún puede apelar la decisión, lo que prolongaría el proceso. Mientras tanto, fanáticos de TK y músicos peruanos observan con atención este caso que reabre el debate sobre el respeto a la autoría y los derechos en la era digital.