

El Movimiento al Socialismo (MAS) confirmó este lunes que su candidato a la Presidencia de Bolivia será Eduardo del Castillo, abogado de 36 años y exministro de Gobierno de Luis Arce, en un giro inesperado que profundiza la fractura con Evo Morales y sorprende al arco político nacional.
Tres días después de que Arce desistiera de postular a la reelección, el partido oficialista anunció que Del Castillo encabezará la fórmula presidencial junto al dirigente campesino Milán Berna, de cara a las elecciones generales del 17 de agosto.
Nacido en Santa Cruz en 1988 —la región más poblada y bastión de la oposición—, Del Castillo estudió Derecho en la Universidad Autónoma Gabriel René Moreno (UAGRM) y actualmente cursa un doctorado en Derecho Constitucional en la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA).
Su salto a la política nacional se consolidó como ministro de Gobierno desde 2020, cargo que Arce mantuvo a pesar de presiones internas, particularmente de Morales, quien pidió reiteradamente su destitución.
Antes, fue oficial mayor en la Cámara de Senadores y participó activamente en las protestas de 2019, tras las elecciones anuladas que el MAS considera un “golpe de Estado” contra Evo.
La lealtad de Del Castillo a Arce fue uno de los detonantes del quiebre interno en el MAS. Morales lo acusó de proteger al narcotráfico y de ser responsable del uso excesivo de la fuerza contra la oposición.
En 2023, tras ser censurado por el Parlamento, Arce lo restituyó en el cargo el mismo día, desafiando incluso a las estructuras tradicionales del partido.
La oposición lo señala por:
Uso excesivo de la Policía en protestas
Irregularidades en la detención de la expresidenta Jeanine Áñez y del gobernador cruceño Luis Fernando Camacho
Vulneración a la presunción de inocencia al exhibir públicamente a detenidos
Choque con la ONU y la Unodc por datos sobre cultivos de hoja de coca
Organismos como Human Rights Watch han criticado su gestión por prácticas que contravienen estándares internacionales de derechos humanos.
La candidatura de Del Castillo no será la única del MAS: el presidente del Senado, Andrónico Rodríguez, también anunció su postulación. Rodríguez, muy cercano a Evo Morales, representa a la otra facción del oficialismo.
La decisión de postular a una figura joven, controversial y con fuerte respaldo de Arce, confirma que el MAS llega a las elecciones dividido y sin su líder histórico como candidato.