

En una emotiva ceremonia realizada en el Auditorio William Morris de la Universidad Católica de Santa María, en Arequipa, se dio inicio a la edición 2025 de la Cruzada Nacional de Valores “Somos Grau, Seámoslo Siempre”. Este evento busca promover los valores de civismo, integridad y patriotismo en las nuevas generaciones, inspirados en la vida y legado del Gran Almirante Miguel Grau Seminario.
La inauguración, llevada a cabo el jueves 22 de mayo de 2025, contó con la presencia del almirante Luis José Polar Figari, comandante general de la Marina; el Dr. Miguel Grau Malachowski, presidente de la Fundación Miguel Grau; y la gerente general de Telefónica del Perú, Elena Maestre Tinao. Las autoridades resaltaron que Miguel Grau continúa siendo un referente de ética y servicio para el país.
Durante el acto se presentaron los tres concursos principales que forman parte de la cruzada 2025:
Premio Nacional “Almirante Miguel Grau”, que reconoce a ciudadanos ejemplares por su compromiso con la sociedad.
“Una Carta a Grau”, dirigido a estudiantes de 5to grado de primaria hasta 1er año de secundaria, que busca fomentar la escritura reflexiva y el amor por el Perú.
“Poema al Almirante Miguel Grau”, para alumnos de 2do a 5to de secundaria, enfocado en la creatividad literaria inspirada en valores patrióticos.
Estas actividades buscan reforzar el civismo y el compromiso ciudadano desde las aulas escolares, promoviendo un diálogo activo sobre ética, historia y orgullo nacional.
La cruzada “Somos Grau, Seámoslo Siempre” fue iniciada en el año 2011 con el objetivo de construir una ciudadanía comprometida con el desarrollo del país. A través de esta campaña, se destacan valores como la lealtad, honestidad, responsabilidad y solidaridad, pilares que Miguel Grau personificó a lo largo de su vida.
Durante la ceremonia, se proyectaron videos con testimonios de ganadores de ediciones pasadas, reafirmando el impacto positivo que esta iniciativa ha generado a nivel nacional.
El evento contó con la presencia de autoridades civiles, militares, eclesiásticas, además de docentes, escolares y medios de comunicación. Todos coincidieron en la importancia de mantener vivo el espíritu de Grau como modelo de conducta en tiempos donde el país necesita referentes de integridad y servicio.