

La cancillería de Panamá anunció este jueves que en los próximos días se reactivarán los servicios consulares entre Panamá y Venezuela, tanto en Caracas como en Ciudad de Panamá, en lo que representa un paso importante para la atención de sus ciudadanos, sin implicar el restablecimiento de relaciones diplomáticas.
«Ante la imperiosa necesidad de los asuntos consulares de sus nacionales (...) han acordado la reactivación (...) de los servicios consulares», indicó el Ministerio de Relaciones Exteriores panameño en un comunicado.
La medida tiene como “objetivo prioritario” brindar asistencia y protección a las comunidades panameñas y venezolanas residentes en ambos países, que llevaban meses sin atención consular formal tras el quiebre diplomático de 2024.
A pesar de este avance consular, el presidente de Panamá, José Raúl Mulino, fue enfático al afirmar que no existen conversaciones con el régimen de Nicolás Maduro para restablecer relaciones diplomáticas.
“No hay ninguna conversación sobre el tema diplomático, ninguna”, aseguró durante su conferencia de prensa semanal.
Mulino reconoció que, aunque se trata de un tema “delicado, pero importante”, la presión económica derivada de la suspensión de vuelos y relaciones comerciales pesó en la decisión.
“Ya había un daño al comercio internacional de la Zona Libre, a nuestra aerolínea nacional y a la repatriación de ciudadanos venezolanos”, explicó.
El 27 de mayo se reanudaron los vuelos entre Panamá y Caracas, operados por Copa Airlines y la aerolínea venezolana Estelar, tras diez meses de suspensión motivados por la crisis diplomática.
La suspensión original fue una represalia del régimen de Maduro, luego de que Panamá y otros países americanos cuestionaran los resultados de las elecciones presidenciales venezolanas de 2024, calificadas como “fraudulentas” por la oposición y organismos internacionales.
El restablecimiento de vuelos y servicios consulares busca mitigar el impacto económico sobre el comercio bilateral, las aerolíneas y los ciudadanos que requieren repatriación o documentación, pero no implica un reconocimiento diplomático del gobierno venezolano.
Panamá se mantiene en la línea de países como República Dominicana, Uruguay, Argentina, Costa Rica, Ecuador, Guatemala, Paraguay y Perú, que han manifestado su preocupación por la falta de transparencia electoral en Venezuela y siguen exigiendo una revisión profunda del proceso que dio la victoria a Maduro.