

Tacna cumple seis días incomunicada por el paro de mineros informales, dejando a cientos de turistas y ciudadanos varados en el terminal terrestre Manuel A. Odría. La crisis impacta también en el abastecimiento de alimentos y combustibles, mientras las autoridades no logran llegar a un acuerdo con los manifestantes.
El corresponsal de Latina Noticias informó que extranjeros atrapados en Tacna, especialmente turistas chilenos y familias venezolanas en tránsito, no han podido adquirir pasajes hacia Arequipa ni Lima debido a los bloqueos en las principales carreteras.
“Nos tocó quedarnos en Tacna porque no salieron pasajes para Lima. No sabíamos que la situación estaba tan grave”, comentó un ciudadano venezolano que espera junto a su familia.
Algunos viajeros optaron por tomar rutas alternativas hacia Juliaca y Cusco, pero enfrentan la incertidumbre de nuevos bloqueos en la carretera interoceánica.
La venta de pasajes hacia Lima está suspendida, y varias empresas han cerrado agencias debido al riesgo en carretera. Por ahora, solo operan rutas locales de corto alcance. Esta situación afecta directamente a residentes que necesitan viajar por trabajo o salud.
La paralización también ha comenzado a generar escasez de productos en mercados de la ciudad, especialmente frutas y hortalizas provenientes del norte del país. Además, algunos grifos en Tacna ya reportan falta de GLP y combustibles esenciales.
El Ministro de Agricultura, Ángel Manero, aseguró que no hay desabastecimiento de productos de primera necesidad, pero los comerciantes locales advierten una caída progresiva en el stock de alimentos.
El origen del conflicto se remonta a la decisión del Gobierno de excluir del Reinfo (Registro Integral de Formalización Minera) a más de 50,000 mineros informales que no lograron formalizarse en los últimos cuatro años.
Esta medida generó protestas en Tacna, Arequipa, Ica, Lima, Cajamarca, Cusco y Trujillo.
Además, el Congreso modificó recientemente la Ley MAPE (Ley de Pequeña Minería y Minería Artesanal), lo que intensificó la molestia del gremio minero.
El impacto económico es severo:
El sector transporte pierde más de S/280 millones por día.
Las pérdidas acumuladas en el transporte de carga superan los S/500 millones, según la Unión Nacional de Transportistas (UNT-Perú).
Pese a las presiones, el Ejecutivo no revertirá la exclusión del Reinfo, pero ha reiterado su apertura al diálogo. La presidenta Dina Boluarte llamó a los mineros informales a abandonar la ilegalidad y sumarse al proceso de formalización.
“La violencia y el odio no son el camino. El Perú necesita paz para avanzar”, declaró Boluarte.
Mientras tanto, Tacna sigue bloqueada, sin acceso a combustible, alimentos clave ni transporte interprovincial, y sin señales claras de una solución inmediata.