Entre los muros cubiertos de musgo y las terrazas andinas de Ollape, en la región Amazonas, un reciente hallazgo ha revelado un sofisticado sistema de manejo hídrico prehispánico. Las excavaciones realizadas durante la temporada 2025 del Proyecto de Investigación Arqueológico Xalca Grande (PIA Xalca Grande) permitieron identificar ductos subterráneos de piedra y mortero integrados a las viviendas de la cultura Chachapoya.
El descubrimiento, efectuado en las Unidades 04 y 05 del sitio, demuestra que los antiguos habitantes de Ollape desarrollaron conocimientos avanzados en ingeniería hidráulica para controlar el flujo de agua dentro de sus construcciones. Además de su función práctica, los arqueólogos sostienen que estas estructuras cumplían roles rituales, según lo evidencian dos conopas con forma de camélido encontradas junto a uno de los ductos, símbolos vinculados a ofrendas agrícolas y ceremonias de fertilidad.
En la Unidad 04, se identificó un ducto de 55 centímetros de ancho, orientado de sureste a suroeste y cubierto con lajas de piedra unidas con mortero. Su diseño revela una planificación intencionada que integraba el drenaje o almacenamiento del agua dentro del recinto. En la Unidad 05, otro ducto de drenaje de más de cinco metros de longitud se construyó bajo el piso de un edificio, bordeando los muros hasta su salida. Su trazado curvo y acabado con argamasa evidencian una obra planificada para canalizar las lluvias y proteger las estructuras.
Para los investigadores, estos hallazgos confirman la existencia de una red hidráulica integrada al diseño urbano del asentamiento. La presencia de sistemas similares en distintos sectores del complejo indica una planificación técnica y simbólica que unía el agua con la vida cotidiana y las creencias espirituales de los Chachapoya.
El sitio arqueológico Ollape, ubicado en La Jalca Grande, se extiende por más de 13 hectáreas y pertenece al periodo Intermedio Tardío (1100–1470 d.C.). Sus edificaciones circulares, muros de piedra caliza y frisos decorativos con figuras geométricas muestran el alto nivel arquitectónico alcanzado por esta civilización amazónica.
Las viviendas se levantan sobre basamentos de hasta tres metros y presentan hornacinas, batanes y restos óseos humanos y animales. Todo el conjunto se encuentra rodeado por un bosque montano húmedo, donde orquídeas y líquenes cubren las estructuras antiguas.
El reciente hallazgo del sistema hidráulico subterráneo en Ollape amplía la comprensión sobre cómo los Chachapoya integraron su arquitectura al paisaje natural, combinando funcionalidad, espiritualidad y dominio técnico en un entorno que aún guarda los secretos de su grandeza.