Un hecho insólito y grave ha sacudido al Ejército del Perú en Arequipa. Un coronel y 28 soldados fueron sorprendidos trabajando en un circo durante su horario de servicio, en una presunta infracción a las normas militares y de conducta profesional.
El operativo estuvo a cargo de la Policía Anticorrupción y la Fiscalía Especializada en Delitos de Corrupción de Funcionarios, quienes intervinieron a los efectivos mientras realizaban labores de desmontaje en el circo “La Tarumba”, instalado en la avenida La Marina, en el Cercado de Arequipa.
Entre los implicados se encuentra el coronel Marco Antonio Quispe Astete, el técnico segundo Justo Palomino Quispe y otros soldados bajo su mando. Según las primeras diligencias, los militares vestían uniforme institucional y habrían utilizado vehículos del Estado para cumplir funciones ajenas a su deber castrense.
Ante la denuncia, el Ejército del Perú confirmó la apertura de una investigación interna a través de su Inspectoría General, a fin de determinar si existió un uso indebido de personal militar o una posible relación irregular con los organizadores del espectáculo. De comprobarse responsabilidades, los involucrados podrían enfrentar sanciones administrativas y penales.
Fuentes cercanas al caso no descartan que se haya producido un acuerdo irregular entre mandos del Ejército y representantes del circo, lo que podría configurar un delito de peculado de uso o abuso de autoridad.
El hecho ha generado indignación ciudadana y fuertes cuestionamientos sobre el control disciplinario dentro de las Fuerzas Armadas. Diversos especialistas en ética militar han pedido sanciones ejemplares y una revisión del uso del personal en actividades no oficiales.