El primer vicepresidente encargado de la Presidencia del Congreso, Fernando Rospigliosi, se pronunció sobre el paquete de reformas del sistema penitenciario anunciado por el Gobierno del presidente José Jerí, el cual busca fortalecer la seguridad ciudadana y mejorar la resocialización de los internos.
En diálogo con RPP, Rospigliosi afirmó que las iniciativas “pecan de exceso de entusiasmo”, al considerar que el Ejecutivo actuará en un periodo muy breve.
“Es un gobierno transitorio que va a durar pocos meses y que no puede tomar medidas de largo aliento. El problema básico de las cárceles es que, en primer lugar, son pocas: hay un 140% de sobrepoblación. En segundo lugar, hay pocos funcionarios del INPE, aproximadamente 11 mil; el INPE calcula que se necesitan 33 mil”, señaló.
El parlamentario también resaltó que los bajos salarios de los agentes penitenciarios —entre S/ 1.800 y S/ 3.300— generan condiciones que podrían facilitar la corrupción dentro del sistema carcelario.
Si bien reconoció que el Gobierno podría acelerar la construcción de nuevas cárceles como medida urgente, advirtió que no será fácil resolver un problema estructural que se arrastra desde hace décadas.
En otro momento, Rospigliosi se refirió a la acusación constitucional contra el expresidente Pedro Castillo y exministros, señalando que el proceso avanza con lentitud debido a la “burocracia interna” del Parlamento.
“Los trámites en el Congreso no son rápidos. Además, influye la cantidad de bancadas y grupos políticos. Finalmente, estas decisiones se toman por votación en la Subcomisión de Acusaciones Constitucionales”, explicó.
Agregó que este martes la Comisión Permanente evaluará la denuncia contra el exmandatario.