Los enfrentamientos ocurridos en pleno corazón de Miraflores entre hinchas de Flamengo y Palmeiras encendieron la alarma a pocas horas de la final de la Copa Libertadores en Lima. Tras la difusión de imágenes con golpes, botellas al aire, vasos arrojados y turistas corriendo para ponerse a salvo, el distrito activó medidas extraordinarias para evitar que la violencia se repita en zonas como la Calle de las Pizzas y el Parque Kennedy.
El choque entre ambas “torcidas” ocurrió mientras seguidores veían otros partidos en los bares del pasaje San Ramón, punto tradicionalmente concurrido y que ahora figura como área de intervención prioritaria para las autoridades locales y policiales.
La comuna estima que más de 50 mil turistas brasileños llegarán a Lima por la final, y al menos 15 mil se concentrarán en Miraflores después del partido. El gerente de Seguridad Ciudadana, Renzo Gallegos, informó que se han realizado coordinaciones con la Embajada de Brasil, la Policía Nacional y oficiales especializados en barras organizadas que llegaron desde ese país para reforzar la operación.
Para esta final, el distrito contará con la presencia de más de 700 policías, con apoyo de la Fuerza Aérea del Perú, que ya intervino en incidentes previos. En el último enfrentamiento, donde participaron cerca de 15 personas, agentes ubicados a dos cuadras lograron disuadir la pelea en cuestión de minutos.
La comuna destaca que cuenta con experiencia previa en este tipo de eventos, recordando la final entre River Plate y Flamengo, que también generó una gran afluencia de hinchas en la zona.
Miraflores activará toda su capacidad logística y tecnológica:
756 cámaras de videovigilancia con inteligencia artificial
Bodycams para agentes municipales
4 drones en vuelo permanente
1,094 serenos desplegados en puntos críticos
Equipos de movilidad urbana y fiscalización en alerta
Toda esta red operará integrada con la PNP, que liderará las decisiones tácticas durante la jornada deportiva.
La municipalidad también coordina con hoteles y hospedajes donde se alojan los hinchas brasileños. Serenos de turismo y personal municipal informan, en portugués, las normas locales:
Prohibición de beber alcohol en la vía pública
Sanciones por desorden
Faltas que podrían desencadenar procesos penales
Las autoridades reconocen que quieren evitar incidentes, aunque no descartan posibles conflictos dada la histórica rivalidad entre Flamengo y Palmeiras.
Pese a los hechos de violencia registrados, Miraflores asegura estar preparado para recibir a miles de fanáticos. El refuerzo policial, el uso de tecnología avanzada y la coordinación con instituciones brasileñas buscan garantizar que la fiesta deportiva se viva sin tragedias.
Mientras crece la expectativa por la final, los vecinos esperan que el despliegue sea suficiente para impedir que la celebración se transforme en caos en las calles del distrito más turístico de Lima.