El papa León XIV expresó este miércoles su pesar por un 2025 marcado por la devastación de la guerra y la muerte del papa Francisco, durante la última audiencia general del año celebrada en la plaza de San Pedro, ante miles de fieles.
En su catequesis, el pontífice recordó que el año estuvo marcado tanto por momentos de alegría, como la masiva participación de peregrinos en el Año Santo, como por episodios dolorosos que han dejado huella en la Iglesia y el mundo. Entre ellos, destacó el fallecimiento del “añorado” Francisco, ocurrido en abril, y los conflictos armados que continúan afectando a distintas regiones del planeta.
León XIV exhortó a los fieles a poner el año que termina en manos de Dios, confiar en su providencia y pedir que en los próximos meses se renueven los signos de gracia, misericordia y paz. Asimismo, invitó a realizar un examen de conciencia, agradecer los dones recibidos y reconocer las faltas cometidas.
El pontífice también resaltó la importancia del Jubileo, abierto por Francisco y que será clausurado por él el próximo 6 de enero, evento que movilizó a millones de peregrinos a Roma en busca de perdón y reconciliación espiritual.
Antes de la audiencia, León XIV recorrió la plaza en el papamóvil, saludando y bendiciendo a los fieles, entre ellos un grupo de jóvenes palestinos presentes por el Jubileo. La jornada culminará con la tradicional misa del Te Deum en la basílica de San Pedro, como acto de agradecimiento por el año que concluye.