

Este febrero, los astrónomos aficionados tendrán la oportunidad de observar un evento astronómico extraordinario: una alineación planetaria de siete planetas. Durante la noche del 28 de febrero, Mercurio se unirá a Venus, Marte, Júpiter, Saturno, Urano y Neptuno, creando un espectáculo único en el cielo que no volverá a suceder hasta el año 2492.
Una alineación planetaria ocurre cuando varios planetas del Sistema Solar se alinean de forma aproximada en el cielo, en la misma línea de la eclíptica, la trayectoria aparente del Sol a lo largo del año. Aunque estos planetas no están perfectamente alineados, se presentan en un arco a través del cielo debido a sus planos orbitales.
Este fenómeno es bastante común, ya que todos los planetas del Sistema Solar siguen casi el mismo plano orbital, pero una alineación exacta como la de febrero es un evento especial.
Desde enero, los planetas Venus, Marte, Júpiter, Saturno, Urano y Neptuno son visibles a simple vista en diferentes momentos de la noche, pero Mercurio se sumará el 28 de febrero, creando una alineación completa. Los mejores momentos para ver el evento son después del anochecer, cuando los planetas Venus y Saturno serán visibles al suroeste, Júpiter estará en lo alto y Marte aparecerá al este.
Aunque Urano y Neptuno también están presentes, se necesitan binoculares o telescopios para observarlos claramente.
Aunque algunos sugieren que las alineaciones planetarias podrían tener efectos sobre la Tierra, la base científica detrás de estas afirmaciones es débil. Sin embargo, las alineaciones sí tienen un impacto en la exploración espacial, ya que pueden ayudar a las naves espaciales a utilizar la gravedad de los planetas para reducir el tiempo de viaje, como lo hicieron las naves Voyager de la NASA.
Para disfrutar de este espectáculo, se recomienda encontrar un lugar oscuro, lejos de la contaminación lumínica, como áreas rurales o montañosas. Además, aplicaciones astronómicas como Stellarium o Star Chart pueden ayudarte a identificar los planetas y obtener más detalles sobre el evento.
Si el clima lo permite, este será un evento fascinante para los observadores del cielo, un recordatorio de la inmensidad del espacio y la maravilla de los cuerpos celestes que lo habitan.