El comediante venezolano George Harris vivió una de las presentaciones más tensas de la historia reciente del Festival de Viña del Mar 2025. El humorista, que se convirtió en el primer venezolano en subirse al escenario de la Quinta Vergara, no logró conectar con la audiencia, que se mostró dividida entre aplausos y pifias desde el inicio.

A pesar de los esfuerzos de los presentadores Rafael Araneda y Karen Doggenweiler, quienes lo introdujeron como un humorista con 20 años de experiencia, el público no reaccionó como se esperaba. Harris comenzó su show con una expresión de entusiasmo: "Buenas noches, Viña. Qué maravilla, qué emoción tan grande", pero rápidamente los silbidos se hicieron escuchar, haciendo que la atmósfera se volviera tensa.

Molesto por la respuesta, el comediante no tardó en responder: "No puedo creer que la gente compre una entrada para pitar toda la noche. Se van a quedar sordos", lo que solo empeoró la situación. Cuando los abucheos aumentaron y los gritos de "¡Que se vaya!" comenzaron a hacerse más fuertes, Harris, visiblemente incómodo, anunció que abandonaría el escenario: "Si quieren que me vaya, me voy". Después de un breve descanso, Harris regresó al escenario, pero su actitud desafiante no calmó al público, y las pifias continuaron.

En su segunda intervención, Harris lanzó comentarios que provocaron más rechazo: "Me da risa que estén pitando. Ojalá tú tengas la carrera que tengo yo. ¡Tengo 20 años haciendo esto! ¡Cállate!", lo que desató una ovación de sus compatriotas, pero también más abucheos del público chileno.

Con la situación sin mejorar, Harris decidió retirarse por segunda vez, mientras los animadores trataban de calmar los ánimos: "Vamos a escuchar el trabajo que ha preparado", dijeron, pero la audiencia ya había tomado partido. Durante su tercera aparición, Harris intentó una rutina musical centrada en anécdotas familiares, pero las pifias siguieron y, al no poder remontar la situación, el comediante optó por poner fin a su presentación.

El espectáculo, que se extendió por cerca de 40 minutos, terminó sin que el comediante recibiera el galardón del festival, la Gaviota. Tras el incidente, Harris se dirigió a sus seguidores a través de Instagram, donde expresó: "Se hizo lo que se pudo, mi gente. Lo siento mucho".