

La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) llegó a Perú para evaluar la situación de la libertad de prensa en el país, en medio de tensiones por las restricciones a la información y los ataques contra los periodistas. Durante su visita, los representantes de la SIP se reunieron con el ministro Gustavo Adrianzén en el Palacio de Gobierno, donde discutieron la relación entre el Ejecutivo y los medios de comunicación.
En el encuentro, el ministro Adrianzén reafirmó que el Ejecutivo peruano defiende la libertad de prensa y negó las acusaciones de restricciones al acceso a la información pública. A pesar de los informes del medio ‘La Encerrona’, que sugieren que la Casa Militar cambió su Plan de Seguridad para bloquear el acceso a información sobre la presidenta Dina Boluarte, Adrianzén sostuvo que el acceso no ha sido restringido.
El ministro también defendió las conferencias de prensa organizadas semanalmente por el Ejecutivo, asegurando que en estas actividades los periodistas tienen libertad para hacer preguntas sobre cualquier tema sin restricciones. Sin embargo, se ha reportado que en eventos oficiales de la presidenta, los periodistas a menudo se encuentran confinados en espacios restringidos hasta que Boluarte se retira, lo que ha generado preocupación en los gremios de prensa.
Durante su visita, Carlos Jornet, presidente de la Comisión de Libertad de Prensa e Información de la SIP, señaló que el panorama de la libertad de prensa en Perú ha empeorado, revelando que el país ha descendido siete posiciones en el Índice Chapultepec en comparación con el año anterior. Jornet resaltó que la prensa no debe adular al poder, sino controlarlo y denunciar irregularidades. A su juicio, la prensa debe ser un espacio para expresar opiniones disidentes y no generar un clima de confrontación permanente.
La llegada de la delegación de la SIP ocurre luego de que la presidenta Dina Boluarte acusara a la “mala prensa” y al Ministerio Público de intentar desestabilizar su gobierno. Boluarte alegó que el Ministerio Público, en conjunto con lo que calificó como “mala prensa”, estaría ejecutando un ‘golpe de Estado blanco’ al tratar de desestabilizar la gestión del Ejecutivo, luego de los allanamientos a funcionarios del gobierno.
La SIP también se reunió con periodistas amenazados, directores de medios y representantes del gremio periodístico. Las conclusiones de esta visita se reflejarán en un informe oficial que será entregado tanto al gobierno peruano como a organismos internacionales, alertando sobre el estado de la libertad de prensa en el país.
En el informe de la SIP, se destacó que países como Cuba, Nicaragua y Venezuela siguen siendo los más afectados por las restricciones a la libertad de prensa. Mientras tanto, Chile sigue siendo uno de los países de la región con menores restricciones en este ámbito.
Este conflicto entre el Ejecutivo peruano y la SIP pone en evidencia las crecientes tensiones sobre el ejercicio de la libertad de prensa en Perú, donde periodistas y medios siguen enfrentando desafíos en su labor informativa, mientras el gobierno de Dina Boluarte se enfrenta a acusaciones de censura y control de los medios.