

La ciudad de Arequipa se prepara para una de sus celebraciones religiosas más masivas. Desde la noche del 30 de abril hasta el 1 de mayo, más de 100 mil peregrinos se trasladarán hasta el santuario de la Virgen de Chapi, ubicado en el distrito de Polobaya, para participar en los actos de veneración.
En la avenida Las Convenciones, en el distrito de José Luis Bustamante y Rivero, se observa una gran fila de camionetas, autos y buses que esperan su turno para salir rumbo al santuario. El precio del pasaje hacia Polobaya y zonas cercanas como Peregrinos y 7 TOLDOS se ha fijado en 25 soles, según informaron los propios transportistas.
Para brindar este servicio especial, los conductores debieron presentar una solicitud formal y pagar un derecho de S/ 87.30 ante la Municipalidad Provincial de Arequipa.
Uno de los temas que más preocupa a las autoridades es la falta de agua potable en el santuario. El alcalde de Polobaya, Wenceslao Cabana, alertó que los visitantes no contarán con servicios básicos adecuados para el uso de baños, lavado de manos y otras necesidades sanitarias.
Ante esta situación, la municipalidad ha solicitado a Sedapar el envío de camiones cisternas los días centrales de la festividad, para abastecer de agua a los miles de asistentes.
La peregrinación a la Virgen de Chapi es una de las manifestaciones de fe mariana más importantes del Perú, y moviliza no solo a arequipeños, sino también a fieles de otras regiones del país. Sin embargo, este año, las condiciones logísticas y sanitarias se presentan como un gran desafío para los organizadores.