

Israel bombardeó este miércoles la localidad siria de Ashrafieh Sahnaya, en las afueras de Damasco, en medio de enfrentamientos entre fuerzas de seguridad sirias y presuntos grupos armados drusos, según reportó la agencia estatal SANA.
La acción militar se produjo horas después de que Israel realizara una primera ofensiva, que calificó como una "operación de advertencia" contra objetivos que, aseguró, planeaban ataques contra la población drusa de la zona. El Observatorio Sirio de Derechos Humanos también informó de fuertes explosiones y sobrevuelo de cazas israelíes, sin precisar el número de víctimas.
En un comunicado conjunto, el primer ministro israelí Benjamín Netanyahu y el ministro de Defensa Israel Katz afirmaron que "Israel no permitirá que la comunidad drusa en Siria sea dañada", destacando los vínculos familiares y culturales entre los drusos de ambos países.
Horas más tarde, el Ejército israelí advirtió que se prepara para atacar infraestructura oficial siria si persisten los episodios violentos. Según su declaración, "se están monitoreando de cerca los desarrollos en la región", elevando aún más la tensión en la frontera entre ambos países.
Israel mantiene una ocupación de los Altos del Golán desde 1967, anexados unilateralmente en 1981. Allí residen 24.000 ciudadanos drusos y unos 30.000 colonos israelíes, en una zona estratégica que sigue siendo punto de fricción regional.