

En un llamado lleno de esperanza, el papa León XIV instó este domingo a que "callen las armas" y que se construya la paz a través del diálogo, durante su tradicional rezo del Ángelus en la Plaza de San Pedro, en el Vaticano.
“Sigamos rezando para que en todos los lugares callen las armas y se trabaje por la paz mediante el diálogo”, declaró el pontífice ante miles de personas que acudieron a la celebración en la festividad de los santos Pedro y Pablo.
En su mensaje, el papa subrayó que su servicio episcopal se basa en la unidad de la Iglesia y en los lazos entre sus fieles:
“Es un servicio que se nutre del perdón y de la confianza recíproca, que debe empezar por nuestras propias familias y comunidades”, dijo.
El pontífice recordó que si Jesús confía en nosotros, entonces también “podemos fiarnos los unos de los otros, en su nombre”.
Pidió además la intercesión de los apóstoles Pedro y Pablo, y de la Virgen María, “para que en este mundo herido, la Iglesia sea casa y escuela de comunión”.
Durante la misma jornada, el papa también agradeció a los fieles que contribuyeron con el Óbolo de San Pedro, la colecta anual destinada al sostenimiento de las actividades del papa y su ministerio:
“Agradezco de corazón a quienes, con su donación, apoyan mis primeros pasos como sucesor de Pedro”, expresó León XIV.
El papa Francisco, antes de fallecer, había dejado conformada una comisión para fortalecer esta fuente de apoyo. Según los últimos informes, en 2024 el Óbolo recibió 58 millones de euros, con un aumento respecto a los 52 millones de 2023. Los gastos ascendieron a 75,4 millones de euros, una reducción frente a los 109,4 millones del año anterior.
La mayoría de los fondos —54,3 millones— provinieron de colectas parroquiales, ofrendas personales y legados testamentarios.